Esta foulard, con esa pinta tan suave y acogedora, está hecho con lana riojana que tiene detrás una tradición artesana de casi un siglo de historia. Está tejido por manos expertas que llevan décadas trabajando el mohair de la mejor calidad.
Es tradición heredar uno de estos fulares de madres y abuelas, porque si los cuidas bien, son eternos. Date un capricho y cómprate uno, o cómpraselo como regalo a tu suegra, tus amigas o hermanas. Porque no hay mayor muestra de amor que arropar del frío del invierno a un ser querido.
Esta foulard, con esa pinta tan suave y acogedora, está hecho con lana riojana que tiene detrás una tradición artesana de casi un siglo de historia. Está tejido por manos expertas que llevan décadas trabajando el mohair de la mejor calidad.
Es tradición heredar uno de estos fulares de madres y abuelas, porque si los cuidas bien, son eternos. Date un capricho y cómprate uno, o cómpraselo como regalo a tu suegra, tus amigas o hermanas. Porque no hay mayor muestra de amor que arropar del frío del invierno a un ser querido.