Son originarias de Burgos, de una pastelería artesana con 4 generaciones de tradición repostera. Dicen que su secreto es no contar el secreto de sus recetas, pero creemos que la mantequilla de vacas pasiegas y la elaboración artesanal tienen mucho que ver. ¡Pero si hasta están cortadas a mano una a una!
Estas pastas tienen tanta historia que ni siquiera en la Solana recuerdan por qué se llaman italianas. Son una delicia. Para disfrutar con el café de la tarde y para que las visitas siempre quieran volver.
Son originarias de Burgos, de una pastelería artesana con 4 generaciones de tradición repostera. Dicen que su secreto es no contar el secreto de sus recetas, pero creemos que la mantequilla de vacas pasiegas y la elaboración artesanal tienen mucho que ver. ¡Pero si hasta están cortadas a mano una a una!
Estas pastas tienen tanta historia que ni siquiera en la Solana recuerdan por qué se llaman italianas. Son una delicia. Para disfrutar con el café de la tarde y para que las visitas siempre quieran volver.